Un poco de historia
El nombre del río Jerte, y por lo tanto también el de la comarca, proviene del árabe: “Xerit”, palabra que puede haber tenido dos significados: "río angosto" o "río cristalino". De esta forma antigua del nombre del río se ha tomado el gentilicio culto: valxeritenses, que se alterna indistintamente en su uso con los más comunes de jerteños, vallenses, o vallejerteños. En el año 1186, el rey Alfonso VIII de Castilla funda la ciudad de Plasencia sobre un asentamiento anterior, para así garantizar y asegurar la posesión de Gredos y del Valle del Jerte. Se establece la Vía de la Plata como frontera entre el Reino de León y la Corona de Castilla, estando el Valle de Jerte dentro de la órbita castellana al igual que la comarca de Plasencia. En la historia del Valle del Jerte, la protagonista ha sido la cereza, y con ella una leyenda que habla de un zar ruso que quiso buscar un refugio de descanso en el Valle del Jerte y que, para que su mujer no añorase las nieves de su tierra, decidió simularlas una vez al año a través de las flores del cerezo.